Como prometido, tras mi «Semana Vegetariana«, aquí estoy de vuelta para contar como ha ido todo y como nos las hemos apañado durante toda esta semana.
El proyecto empezó con mucha motivación, teníamos muchas ideas para rellenar los menús diarios y el plan parecía ser incluso sencillo. Fuimos a comprar el Sábado para tenerlo todo listo y en la lista de la compra añadimos alimentos que normalmente no solemos comprar (o no lo hacemos tan a menudo): legumbres, tofu, seitán, todo tipo de verduras…
Así pues empezó la semana.
Los desayunos los tuvimos rápidamente solucionados. Aunque en casa hayamos sido siempre del típico bocadillo con jamón o queso, es cierto que ya llevamos un tiempo «innovando» en este sentido y escogiendo opciones alternativas como porridge de avena con fruta, tostadas con tomate y aguacate…
Para las comidas y cenas, nos fueron muy bien las fuentes de inspiración que recogimos con antelación, más que nada para no aburrirnos y comer siempre lo mismo.
Empezamos el Lunes con unos Burritos vegetarianos con alubias negras buenísimos, por la noche fue el turno del Tofu Hawaiano a la parrilla. Martes comimos unas habas con arroz riquísimas hechas por mi madre y cenamos un Revuelto de champiñones y tofu.
Miércoles comimos Pasta con guisantes y espinacas y por la noche tuvimos una cena a la que íbamos de invitados y a la que no pudimos decir que no a un riquísimo plato de lomo de cerdo con castañas.
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La cena pues fue el detonante de la caída a la rutina que acabó en desmotivación y que hizo que en los últimos días de la semana, si bien es cierto que intentamos «vegetarianizar» una de las comidas del día, no lo cumplimos a rajatabla.
Este es pues el relato de una Semana Vegetariana un poco fallida, que lejos de desmotivarnos para siempre, ha hecho que nos viniesen unas ganas tremendas de volver a fijar otra semana en el futuro para ponernos de nuevo a prueba.
No sólo eso sino que me he dado cuenta de que ser vegetariano, a diferencia seguramente de hace unos años, no es tan difícil de lo que me pensaba y que es perfectamente compatible con llevar una vida sana y saludable.
Por último, quería añadir ésta infografía que me ha parecido muy interesante sobre las fuentes de proteína alternativas a la carne y el pescado.
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